Las brocas con avellanador suelen ser brocas espirales para madera que incorporan un avellanador. Este avellanador tiene un agujero interior del diámetro de la broca para permitir el paso de esta, quedando ambos centrados en el mismo eje.
Además suelen incorporar un tornillo de cabeza hexagonal que permite justar la posición del avellanador a lo largo de la broca espiral. De esta forma podemos ajustar la profundidad del taladro que realiza la broca antes de que el avellanador realice el avellanado en la madera.
Una ventaja es que realizamos el taladro guía para el tornillo y el avellanado a la vez. Pero debemos tener una broca con su avellanador exclusivo para ese diámetro de broca. Por eso necesitamos comprar brocas de varios diámetros con su avellanador incluido para los distintos gruesos de tornillo que utilicemos normalmente.
Otra ventaja con respecto a los avellanadores sin broca es que al hacer a la vez el agujero guía y el avellanado ambos quedan centrados. Así el tonillo entrará centrado y su cabeza quedará bien centrada con el bisel del avellanado.

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Si compramos dichos avellanadores con broca incorporada tendremos un conjunto avellanador broca para cada tamaño de agujero que necesitemos taladrar. Bueno, para los diámetros que hayamos comprado.
Mi recomendación es que te fijes en qué tipos de tornillos utilizas, cuál es el diámetro de broca más adecuado para taladrar los agujeros guía para esos tornillos, y en función de eso comprar las brocas con avellanador que necesites. Y es que por los comentarios que veo de los distintos productos a la venta, en los juegos baratos las brocas no son de buena calidad y se rompen demasiado fácil.
Una opción es comprar un juego en el que ya tenemos varios diámetros de broca, cada una con su avellanador. En estos casos adquirimos un kit con brocas de diferentes diámetros con su avellanador incorporado. Aunque los de buena calidad suponen un desembolso importante de dinero y los juegos baratos no suelen traer brocas de buena calidad.
Otra posibilidad es comprar avellanadores sin broca. En ese caso por lo general solo necesitamos uno, el cual utilizaremos una vez hayamos realizado el agujero correspondiente con la broca del diámetro que necesitemos en cada caso. Pero en ese caso debemos ser precisos a la hora de trabajar para que el avellanado quede bien centrado con el agujero guía que hemos taladrado.
Broca con abocardador para madera
Puedes fijarte entre los productos recomendados que también hay brocas que permiten abocardar la entrada del agujero guía que hacemos en la madera. De esta forma podemos agrandar el diámetro en la entrada del agujero guía que hemos taladrado y biselar el fondo de dicho agujero. Esto se hace para ocultar la cabeza del tornillo dentro de la madera.
Avellanar vs abocardar: Avellanar es biselar la entrada de un agujero, mientras que abocardar es anchear la entrada de un agujero. Se puede realizar una de las dos tareas por separado o se pueden realizar ambas en el mismo agujero, con la curiosidad de que en un agujero abocardado en madera el avellanado se suele realizar en el fondo del abocardado y no en la entrada. Esto nos permite ocultar un tornillo de cabeza biselada dentro del agujero y después tapar el agujero con un tapón de madera del mismo diámetro.